Muchos chefs recomiendan congelar guisantes para conservar su sabor, textura y color. Esta práctica no solo ayuda a congelar un alimento para su posterior uso, sino que también es una forma práctica y saludable para aprovechar al máximo los alimentos. Aunque congelar guisantes puede resultar intimidante para algunos, es un proceso relativamente sencillo que ayudará a obtener los resultados deseados. A continuación se presentará una mirada más detallada a la congelación de guisantes y cómo llevarlo a cabo para obtener los mejores resultados.
1. ¿Cómo congelar guisantes?
Paso 1: Primer paso
Para congelar los guisantes, antes de todo necesitas lavar los guisantes a fondo para eliminar toda la tierra. Enjuágalos con agua fría y dejar que sequen al aire. Una vez que todos los guisantes estén limpios, extendelos en una lata o bandeja para que se seque el resto de agua.
Paso 2: Espolvorear con una mezcla de sal y azúcar
Cuando los guisantes estén completamente secos, espolvorea una mezcla de sal y azúcar sobre ellos. Esto ayudará a retener los guisantes frescos y evitará la formación de hielo durante el congelado.
Paso 3: Preparar la masa.
Luego, necesitas preparar una masa blanda con harina y agua. Esta masa servirá como una barrera entre los guisantes y el aire, lo que ayudará a mantenerlos más frescos durante el congelado. Estira la masa sobre una superficie plana y cubre tu plato de guisantes con la masa. La masa deberás tener un grosor de al menos 0,5 cm.
Una vez que los guisantes estén cubiertos con la masa, procede a colocar la lata en el congelador. No coloques los guisantes directamente sobre el hielo, ya que esto causará un descongelamiento resultante. Para obtener los mejores resultados, deja los guisantes en el congelador por al menos tres horas antes de servir. Si los deseas guardar por más tiempo, puedes preparar un plato con guisantes congelados y mantenerlos durante seis meses sin problemas.
2. Ventajas de los guisantes congelados
Beneficios nutricionales. Los guisantes congelados conservan la mayoría de los nutrientes, lo que los convierte en una gran alternativa a los guisantes frescos. Están llenos de proteínas vegetales, vitamina B6, zinc, hierro y magnesio, entre otros, y contienen varios antioxidantes que ayudan a prevenir enfermedades crónicas. Además, contienen un alto contenido de fibra, lo que los hace esenciales para una dieta saludable.
Cocinarlos es fácil. Los guisantes congelados son mucho más fáciles de cocinar en comparación con los guisantes frescos, ya que no requieren trabajo previo, como el pelado o incluso el descongelado. Esto significa que, si quieres preparar una comida rápida y saludable en casa, los guisantes congelados pueden ser de gran utilidad. Todo lo que tendrás que hacer es calentarlos en una sartén con un poco de aceite y especias durante unos minutos y la comida estará lista.
Valor añadido. Uno de los grandes beneficios de los guisantes congelados es que traen un valor añadido a tus comidas. Puedes agregarlos a tus platos fácilmente y aportan un toque de color y sabor. Además, algunos supermercados ofrecen guisantes congelados con especias diferentes, lo que los convierte en una alternativa muy versátil para producir comidas saludables y satisfactorias.
3. Ingredientes necesarios para congelar guisantes
Primer paso: elegir los mejores guisantes
Lo más importante para la congelación de guisantes es asegurarse de que se está usando una variedad de buena calidad. Es importante elegir guisantes maduros y saludables, que no tengan signos de podredumbre. Estos typesarrls están llenos de sabor y crean la mejor textura para cuando se hierven y congelan. Se debe retirar la piel de los guisantes mediante un pelador de verduras para exponer la pulpa adentro.
Segundo paso: cocinando los guisantes
Una vez retirada la piel de los guisantes, es necesario hervirlos ligeramente. Generalmente, se recomienda hervirlos en agua ligeramente salada durante un máximo de dos minutos. Esto ayudará a preservar la textura y el sabor originales. Después de hervir, hay que refrescarlos con mucha agua congelada y dejarlos enfriar antes de pasar al siguiente paso.
Tercer paso: congelación de los guisantes
Una vez cocinados y ya fríos, deben ponerse en una bolsa name y congelarse. Hay que asegurarse de sacar todo el aire antes de cerrarla herméticamente. Una vez colocados adentro de la bolsa, los guisantes estarán listos para congelarse. Es importante asegurarse de que la temperatura de la habitación es la adecuada para el proceso de congelación. Se recomienda una temperatura ambiente de menos de cinco grados. Al finalizar el proceso los guisantes podrán tenerse almacenados durante tres meses sin que pierda su sabor y su textura.
4. Paso a paso guía para congelar guisantes
1. Reúna los materiales necesarios. Para congelar los guisantes, será necesario reunir algunos materiales esenciales. Esto incluye una solución de lavado de guisantes, sal, una olla grande con agua hirviendo, un enfriador, un cucharón, una tabla de picar, un contenedor con tapa para congelar.
2. Lave, raspe y sazone los guisantes. Después de lavar los guisantes con la solución de lavado, use una tabla de picar para pelar y dejar los guisantes en trozos pequeños. Después de cortar los guisantes, sazónalos con sal y dejen reposar por unos minutos hasta que absorban el sabor.
3. Hierva el contenido en la olla. Añada los guisantes sazonados a la olla con agua hirviendo. Agregue también algunos trozos de cebolla y un puñado de hierbas frescas para mejorar el sabor. Deje hervir el contenido durante aproximadamente diez minutos, luego escurra el contenido en un enfriador y deje enfriar por unos minutos.
5. Almacenamiento y descongelación de guisantes congelados
Los guisantes congelados son un excelente añadido a ensaladas, verduras mezcladas o cualquier otro plato. Si bien los guisantes son nutritivos en su estado natural, se pueden conservar durante varias semanas si se almacenan y descongelan correctamente. Para garantizar que los guisantes mantengan su sabor y nutrición óptimos, debemos seguir estos consejos.
Almacenamiento:debes almacenar los guisantes congelados en su envase original o en un contenedor sellado. Esto te permitirá mantener su frescura. Si los guardas en un contenedor o recipiente asegúrate de que esté debidamente etiquetado con la fecha de congelación y la cantidad y tienes un trillar hermético. Asegúrate de que no estén expuestos a condiciones de luz, calor ni humedad. Los guisantes congelados se pueden guardar por hasta 8 semanas sin perder sus propiedades nutritivas, sin embargo, es recomendable consumir en cuanto sea posible.
Descongelación:La forma más sencilla de descongelar losguisantes congelados es colocarlos en un recipiente con agua tibia y dejarlos remojando por 10-15 minutos, o antes si están completamente descongelados. Otra opción es colocarlos en el refrigerador la noche anterior, pero hay que tener en cuenta que deben ser consumidos inmediatamente una vez descongelados. No se recomienda usar el microondas para descongelarlos. Después de descongelar los guisantes, se deben usar lo antes posible.
6. Las recetas más comunes con guisantes congelados
Para aquellos que les gusta cocinar los guisantes congelados es un producto perfecto. Se pueden preparar de muchas maneras distintas, desde purés o guisos hasta ensaladas o platos fríos. A continuación, les proporcionamos algunas ideas para cocinar con guisantes congelados.
- Puré de guisantes y patata: Hay que cocer primeramente los guisantes con una patata y, a continuación, triturarlos. Se puede extrapolar a cualquier combinación de legumbres: por ejemplo, judías blancas cocidas con guisantes.
- Ensalada de guisantes: Se cortan los guisantes congelados previamente descongelados en trozos pequeños con cebolla, ajo y aceite. Se puede agregar pollo a la ensalada si se quiere.}
- Salteado de guisantes con pollo: Trituramos los guisantes en el mini-triturador con un poco de aceite para hacer una especie de mezcla. Después, se rehoga todo con un poco de pollo, cebolla y alcaparras.
Existen muchísimas recetas con guisantes congelados y, además, los guisantes congelados suelen utilizarse como base para cualquiera de ellas. Siendo un producto económico y con muchas posibilidades, los guisantes congelados le protestarán mucho a la hora de elaborar platos sustanciosos para toda la familia. Después de conocer los beneficios y riesgos de la congelación de guisantes, queda claro que comerlos congelados puede ser una excelente opción para aquellos que desean aprovechar sus aportes nutricionales sin perder sus propiedades. A la hora de congelar los guisantes, recomendamos seguir estrictamente los pasos descritos para asegurar su calidad y aroma. Por último, no olvides disfrutar de estas verduras como parte de tu dieta saludable.