Pero el juego ha sido popular gracias a sus exploraciones y la libertad de los jugadores con el entorno, y uno de los elementos que más podemos manipular son los aldeanos y los animales. Como el juego se desarrolla en varios climas, podemos encontrar caballos, cerdos, gallinas, entre otros, que nos dan ciertas ventajas en el juego.
Pero en la zona fría del juego, encontramos un animal distinto, osos polares.
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Osos polares en Minecraft
Estos osos se distinguen por su pelaje de color blanco, son bastantes grandes y agresivos, por lo que hay que tener cuidado y acercarse lentamente, sin movimientos bruscos. Los osos polares andan solos o en manada, con un máximo de 4 osos.
¿En qué zona del juego encontramos osos polares en Minecraft?
Los osos polares están en las biomas heladas, como a tundra nevada, en las montañas nevadas y en la tundra de los picos de hielo. Generalmente están adentrados de su sistema, por lo que tenemos que explorar varias hectáreas antes de ver uno.
Peligros de los osos polares
Los osos polares son agresivos, y si queremos domesticar a uno es mejor encontrarlos solos y no en manada. Si están juntos, uno de ellos es un bebé y otro el padre, por lo que resulta peligroso la cercanía porque interpretan que es una amenaza.
Si tenemos la mala suerte de ser atacados por una manada de osos polares, es casi inevitable escapar de ellos, ya que sus ataques logran quitar vida rápidamente.
¿Cómo domesticar un oso polar en Minecraft?
Para domesticar osos polares vamos necesitar un buen suministro de pescados, y como explicamos anteriormente, que el animal se encuentre solo. Si este es el caso, nos vamos acercando y le damos el primer pescado, de esta manera entrará en confianza y no nos atacará.
Cuando termine de comer le damos el segundo, y le vamos suministrando hasta que aparezca un corazón sobre él, esto nos indica que ya podemos tenerlo como mascota. Podemos domesticar desde un oso polar bebé hasta uno adulto.
¿Qué beneficios nos ofrece domesticar un oso polar en Minecraft?
Los osos polares pueden amarrarse para tenerlos cerca, podemos montar sobre ellos para recorrer distancias más largas, como montar un caballo, y lo más importante, pedirle que ataque en caso de ser necesario.
Cuando recorremos aldeas, la reacción de los aldeanos puede ser diferente, desde recibirnos y permitir recorrer con toda la confianza, hasta atacarnos una avalancha de ellos, y si son muchos no da tiempo de reaccionar. Con el oso polar podemos atacar y resguardar la vida.
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